Wednesday, January 2, 2008

Y un día...

La vida que me regala magia. ¿O seré yo, que quiero verla?. Un gran amor pasó en mi vida y ahora es dolor. Viajé intentando disiparlo, por lugares viejos y tristes, ruinas sobre ruinas, es lo que ví. “Esto también pasará”, fue mi conclusión y consuelo. Vuelvo a mi país, ciudad y amigos, me integro al mundo y reconozco a una mujer dispuesta a tratarme, del mismo nombre, por más señas, que aquella del amor transfigurado. Buscando paz estoy con ella, y el dolor amaina en su presencia. “Esto también pasará”, le dije en un momento; aproveché su condición para decirlo, pues está enferma. “¿Por qué me dices eso?, me pregunta, y sorprendida me enseña un anillo de plata que retira de su mano. En el interior una leyenda grabada: “Hasta esto pasará…”. Es la única joya que carga. Sentí, una vez más, y agradecido, que el mundo hace sentido algunas veces. Tiempo después, nos quedamos dormidos.

1 comment:

hana matsumoto said...

BUAAAAAAAAA!!!! Qué lindo!!! Me alegra que Ale me haya mandado el link a tu blog, me alegra leer a un hombre ... un beso